Reseña La dama y el vagabundo (Disney+ Film)
La guarida del viejo
Dullahan se abre una vez más, esta vez para hablar sobre un tema que quedo
pendiente durante mi ausencia. La verdad, acostumbro de dar una introducción pequeña
antes de mencionar el producto del cual vamos a hablar, pero en esta ocasión prefiero
ir directo al grano, pues este mismo método introductorio ya fue utilizado para
tratar las actuales costumbres de la compañía de Mickey Mouse. Vamos a hablar
del filme original de Disney+. La dama y el vagabundo, un live action que
prefiere adentrarse a un sector de plataforma de streming que intentar lograr
algo en salas de cine como sus anteriores remakes de accion real.
La dama y el vagabundo es
uno de los clásicos eternos de la compañía Disney que a pasado de generación en
generación divirtiendo a la familia entera. Igualmente fue una de las pocas que
lograron contar con una secuela aceptable durante los años donde el ratón
buscaba sacar una secuela de todo directo al formato casero. Ahora 79 años después
de su estreno una cinta Live Action es lanzada como contenido exclusivo de la
plataforma Disney +. Lamentablemente al tener acceso al filme se vuelve
obvia la razón del por qué esta no fue lanzada al cine como los demás remakes
live action que buscan exprimir la nostalgia de los padres para llegar a los
hijos.
Comenzare diciendo que
esta película de casi 2 horas de duración resulta en un intento descarado de
ocultar una agenda política bajo el pretexto de hacer cambios agradables para
que valga la pena hacer un remake. Personajes de piel blanca que pasan a ser de
etnia afroamericana sin ningún motivo (trayendo consigo el problema de
mantenerse en los años 30 y querer pasar por alto un matrimonio de una persona
blanca con una afroamericana sin repercusiones racistas de la época),
convertir personajes queridos en el género opuesto sin una razón (algo como lo
ocurrido con Shun en Caballeros del Zodiaco), etc.
La película se siente con
un aire de auto complacencia. Nunca busca abarcar un tema fuerte ante sus
cambios y pretende que todos aceptemos sin más esto, como si el titulo fuera suficiente para satisfacer a cualquier sector demográfico que la vea. Sumado a los cambios a las
personalidades de nuestros personajes principales y secundarios. El tío Jock
pasa a ser una canina bajo el concepto ridículo de los perrijos (De esos que
tienen las personas para tomar fotos con costosos atuendos mandados hacer y son
tratados como hijos en lugar de mascotas), el tio triste de ser un veterano bonachón
con historias que contar se vuelve un amargado perro de cacería que solo tiene
como objetivo atrapar una rata. Ahora los que más duelen, Reina pasa de ser un
personaje encantador e inocente ante la realidad del mundo a ser una copia de
Chloe de Beverly Hills Chihuahua. Golfo a abandonado aquel personaje carismático
e inteligente para ser un personaje egoísta y hasta cierto punto agresivo ante
las cosas que profesa para un estilo de vida. Aquellos entrañables personajes
se han esfumado y en su lugar tenemos una serie de arquetipos que no pasan de
ser lamentablemente un cliché andante sin mucha alma propia.
El guion de la película se
siente un tanto dispar. Por momentos trata de seguir la línea original del clásico,
pero cuando trata de abordar temas nuevos el ritmo se rompe y decae bastante. Resulta bastante inconsistente lo rápido que avanzan las cosas para unos minutos después aletargar la película con una serie de escenas sin mucho peso argumental y que se sienten como puro relleno para cumplir con una duración predeterminada. Sobre todo con el agregado del nuevo “villano”. Lamentablemente esta nueva versión
sufre lo que en su momento sufrió Frozen al agregar un villano innecesario para
una historia que simplemente no lo necesita, el perrero resulta ser un
personaje sin alma, carente de personalidad o peso dentro de la trama. Cada que
aparece se siente como un retroceso en el avance de la historia, pues sus
chistes no funcionan y sus diálogos pareciera que surgieron por medio de una improvisación
en lugar de estar en el guion. Intrascendente y carente de cualquier
sentimiento de amenaza, este villano puede ser el cambio más dañino de los
nuevos elementos agregados.
En el departamento de actuaciones puedo decir
que es una ruleta. Los humanos se sienten una caricatura viviente la mayor
parte del tiempo que nos hacen sentir en una sitcon juvenil de últimos años mientras la mayoría de los actores que prestan su voz para los
caninos parlantes son muy aceptables e incluso la voz de Golfo resulta
sobresaliente para la nueva personalidad y carácter que tiene el personaje.
En cuanto el apartado
musical debo decir que nos encontramos con un producto a medio coser. Es
agradable escuchar un estilo musical similar al clásico por momentos y algunas
piezas nuevas que acompañan las secuencias. La banda sonora resulta ganadora
mayoritariamente, lamentablemente no podemos decir lo mismo del Soundtrack. Pasando
de la canción de los créditos que es exactamente la misma que la original pero con
nuevos complementos modernos, el resto de canciones que aparecen son burdas,
carentes de magia y lamentablemente no cuadran con lo que estamos viendo en
pantalla. Canciones como la de los gatos siameses (la cual fue re escrita por
considerarse racista) Bella Notte y un compendio de nuevos temas agregados se
sienten desangelados y una distracción más que un complemento narrativo.
En cuanto los efectos
especiales debo decir que afectan más a la película de lo que la ayudan.
¿Recuerdan cómo lucían las películas de los inicios de los 90 con animales
parlantes? Imaginen ver algo igual en pleno 2019. Es increíble ver como el
estudio que logro hacer leones hiper realistas con El rey león no logran
mantener ese sentimiento cuando los perros hablan. Todo el rostro es
digitalizado y pierde realizo al mantener el cuerpo del perro real mientras la cara y facciones resultan sumamente falsos.
Igualmente, los animales en ciertos momentos se sienten más como un render mal
ejecutado que animales que están presentes, un ejemplo es el musical de la
perrera.
En cuanto la producción puedo
decir que realmente los encargados de vestuario y de construir los sets logran
crear la fantasía de encontrarnos en la década de los años 30. Cada detalle de
las calles y los transportes, el manejo de ciertos elementos como carteles con
mensajes o publicidad de aquellos años son un detalle coqueto para lograr esa aceptación
del espectador ante el tiempo donde todo transcurre. Los vestuarios de los
personajes humanos son buenos y detallados por momentos y aunque aparecen poco
se agradece el esfuerzo que les invirtieron.
En conclusión. La dama y
el vagabundo de Disney + es una cinta carente de corazón y un distintivo
especial que le haga sentir con alma propia. Trata de ser políticamente correcta pero a la vez no dejar atrás nada de los elementos principales lo que causa un
choque de incongruencias con el tiempo en el que transcurren los sucesos. No
respeta al material de origen ni a los personajes que robaron los corazones de
casi 7 generaciones. Es simplemente un producto desesperado para mantenerse en
boca de todos pero que no logra más que demostrar que la fábrica de ilusiones a
muerto y que solamente buscan vivir de sus mejores años con monstruosos híbridos
de live action y animación CGI. Le doy un 2, no la recomiendo para nada y menos
si disfrutaron el titulo original. Nos vemos en una próxima ocasión mis
queridos visitantes de la noche.
Comentarios
Publicar un comentario