Reseña La vida moderna de Rocko: Cambio de Chip

La modernidad en la cual estamos constantemente moviéndonos puede ser bastante abrumadora para la gente, sobre todo para aquellos que siguen recordando claramente los años pasados de sus vidas. Aquellas bellas vivencias de juventud o de su infancia, aquellos momentos tan efímeros en su momento, pero que ahora resulta ser tan entrañables y especiales. La nostalgia nos mueve a un gran sector de personas. Desde los veteranos de la generación X, pasando por los milenials que recuerdan con mucho cariño aquellos últimos 10 años antes de la llegada del nuevo milenio, hasta alcanzar a la generación Z con una perezosa y poco empática comprensión hacia los años anteriores a ellos. Hoy vamos a reseñar una película animada para la plataforma Netflix que va traer un interesante discurso sobre el impacto de las generaciones en la actualidad y la creciente taza de individuos añorando sus mejores años, al igual que nos dará una enseñanza que muchos deberían comprender sobre el progreso. Hablemos pues mis queridos moradores nocturnos de “La vida moderna de Rocko: Cambio de Chip”

Puede que para algunos de los lectores más jóvenes les resulte poco conocido los nombres de Rocko, Filburt o Heffer, aquellos simpáticos animales antropomórficos nacidos en los años 90 que nos contaban sus aventuras y desventuras todas las tardes por el antes respetado canal Nickelodeon. La vida moderna de Rocko era en ciertos términos una serie extravagante por las disparatadas aventuras que nos relataban, trasgresora por los temas y el humor subido de tono de la serie en varias ocasiones sin llegar a lo meramente vulgar como otras series (Rem y Stimpy) y finalmente crítica para una sociedad que se acerca al fin de milenio, donde la economía se encontraba en una delgada balanza, donde las relaciones ínter raciales aun eran muy criticadas, etc.

Esta película o mejor dicho mediometraje trata de situar la serie en un nuevo contexto allá en donde teóricamente la serie original llego a su fin, con los tres amigos atrapados en una casa impulsada por un cohete que los tuvo viajando por el espacio exterior. 20 años han estado ausentes Rocko y sus amigos de O-Town hasta que encuentran una forma de volver a la Tierra, ahora descubrirán que su ciudad natal se encuentra completamente cambiada. Rocko ha perdido su trabajo; cada dos minutos las tiendas "escupen" nuevas versiones de smartphones; la televisión ahora es un tanto obsoleta por el Internet, etc.

Con una premisa tan clara la aventura animada comienza a mostrarnos sin miedo a herir al espectador sus verdaderas intenciones. El especial resulta algo impulsado por el motor de la nostalgia y refleja aquel cada vez más constante pensamiento en la gente "todo tiempo pasado fue mejor". Pero a su vez, el que se mueva a través de la nostalgia hace una crítica directa a sus espectadores y a la sociedad entera al centrarse en la idea de cómo la gente se resiste al cambio. Ya sea por el paso del tiempo o porque les tocan las cosas de su juventud o infancia y las adaptan al público actual. Esto se ve muy reflejado en nuestro protagonista el cual durante nuestra infancia fue el reflejo de un joven teniendo que adaptarse a la vida adulta y ahora se vuelve un adulto que añora sus mejores años y lo que lo hacían feliz hace 20 años. En un modo inteligente hacen que nosotros nos convirtamos en Rocko y veamos atreves de él la gama de errores y negaciones al cambio que tomamos la gran mayoría de las personas. 

La crítica llega en forma de indirecta muy directa a todos los que alguna vez nos hemos quejado por que cambian a un actor de cine en una película, hacen una nueva versión de una serie que amábamos de niños o cuando traen de vuelta dichas cosas y exigimos con mucha agresividad las voces originales del doblaje, el estilo de animación, etc. Igualmente se burla mucho de las generaciones de los últimos 40 años. Cosas como los generación X que no pueden creer que las cintas basadas en comic´s sean tan agresivas y dramáticas ahora, que consumamos estúpidamente el mismo producto una y otra vez solo por llevar un numero nuevo en la portada, las adicciones de compras de Internet y la ridícula necesidad de los milenials y generación Z por querer grabar y fotografiar todo lo que acontece a su vida y ahogarse en un mar de selfies.

Igualmente como punto positivo puede contarse la grata animación que busca mantener un diseño clásico al de la serie original pero ahora con un brillante formato que aprovecha el HD. La banda sonora que nos hace sentir viendo un capitulo clásico de la serie de televisión y el doblaje que en su mayoría logra mantener la gran mayoría de voces originales (lamentablemente los actores que daban vida a Rocko y a la señora Cabeza Grande ya han fallecido). Netflix logra hacer una propuesta que se vende sola. La consumimos con emoción y a la vez nos critica a nosotros mismos y nos hace pensar como nos hemos vuelto seres demasiado exigentes y que en ocasiones hacemos un drama por algo tan banal.

Igualmente el mediometraje logra dar una fuerte crítica a la industria de la animación contemporánea. Hay un par de chistes muy inteligentes que fácilmente podemos asimilar como un mensaje enfocado para los grandes monstruos de la animación como lo son Disney con sus avances tecnológicos pero que lamentablemente son usados de una manera ridícula y carente de emoción o pasión en el proyecto (El rey león es el mejor ejemplo). El único pero que le doy es posiblemente que la duración del mediometraje resulta muy fugas y aunque todo lo que expone es resuelto de una manera satisfactoria. No mal entiendan, la mini película con sus cortos 48 minutos logra satisfacer las expectativas, pero nos deja sintiendo que todo ha durado a penas un parpadeo. 

Ay un tema interesante que se maneja dentro de esta aventura animada y que se siente tan natural dentro de la formula. El tema en cuestión es la aceptación a las personas que normalmente se les discrimina por sus preferencias o cambios de vida para ser felices. Algo que lamentablemente sigue muy latente en nuestros días, pero que aquí se usa como un discurso de aceptación al cambio y de permitir que las personas sean felices sin miedo al que dirán de la sociedad o de sus propias familias.

Finalmente, creo que a pesar de toda la comedia con la cual nos critican a la vez y que los personajes sigan tan frescos como hace 20 años. El mayor punto a meditar y apreciar es que todo se siente como algo hecho con pasión y no solo lanzado para ganar dinero a causa de la nostalgia. Nos hace meditar en como tememos al cambio y que este es algo natural y queramos o no, pasara. Ed cabeza grande lanza un discurso pequeño pero emotivo respecto a esta enseñanza y nos deja pensando en que debemos disfrutar el momento en lugar de añorar lo que ya vivimos, pues nunca sabremos cuanto duraran las cosas que amamos actualmente.

Yo le doy un rotundo 10. Los elementos que hicieron de culto a la vida moderna de Rocko siguen latentes en esta película. El humor subido de tono, las críticas lanzadas sin temor al espectador y una moraleja que todos deberíamos tomar en cuenta, hacen que esta historia se vuelva imperdible para los fanáticos de la serie clásica. Solo queda que nos pongamos en los zapatos de Rocko y sin temor a salir al exterior tras no encontrar nuestro viejo programa de antaño favorito en Tv, comprendamos que ya no estamos en los 90, pero hay muchas cosas afuera que vale la pena descubrir. Nos vemos hasta la próxima mis queridos moradores de la noche.